jueves, 9 de septiembre de 2010

UMMM... METE LA CUCHARA EN TODO

Estaba el otro día estaba en una reunión con un grupo heterogéneo de personas, de todos los signos ciudadanos, políticos y religiosos y se tenían una discusión y enfrentamiento de apoyar o no un trabajo social con los ancianos y de apoyar al pueblo vecino.

En nuestros pueblos es común tomar partido, dividirnos por todo, criticar lo que hacen los demás; tomamos la determinación de ignorar, apartar y no tomar en cuenta a los que no piensan como nosotros.

Yo les escuchaba, y en fondo de mi corazón me daba tristeza, siendo tan pocos, viviendo en este camino toda la vida, relacionándonos a cada día y separándonos por política, por intereses y hasta por denominación cristiana.

Como venía de la Eucaristía e iba a una reunión con Campesinos, andaba la Biblia y les dije, me permiten leerles unas Palabras de Jesús... me quedaron viendo raro, y claro hicieron un silencio...

"Yo les digo a ustedes que me escuchan: amen a sus enemigos, hagan el bien a los que los odian, bendigan a los que los maldicen, rueguen por los que los maltratan.

Al que te golpea en una mejilla, preséntale también la otra. Al que te arrebata el manto, entrégale también el vestido. Da al que te pide, y al que te quita lo tuyo, no se lo reclames.

Traten a los demás como quieren que ellos les traten a ustedes. Porque si ustedes aman a los que los aman, ¿qué mérito tienen? Hasta los malos aman a los que los aman.

Y si hacen bien a los que les hacen bien, ¿qué gracia tiene? También los pecadores obran así. Y si prestan algo a los que les pueden retribuir, ¿qué gracia tiene? También los pecadores prestan a pecadores para que estos correspondan con algo.

Amen a sus enemigos, hagan el bien y presten sin esperar nada a cambio. Entonces la recompensa de ustedes será grande, y serán hijos del Altísimo, que es bueno con los ingratos y los pecadores. Sean compasivos como es compasivo el Padre de ustedes.

No juzguen y no serán juzgados; no condenen y no serán condenados; perdonen y serán perdonados. Den, y se les dará; se les echará en su delantal una medida colmada, apretada y rebosante. Porque con la medida que ustedes midan, serán medidos ustedes." (Lucas 6,27-38)

Se quedaron viendo, no decían palabra... y para concluir, les recordé la invitación de María en Cuapa: "Ámense, perdónense, hagan la paz, pues si ustedes no la hacen de nada sirve el que la pidan".

¿Qué más les podía decir? y dice un Señor, !!! Uummmmm !!!, este Hermano Presbítero, mete la cuchara en todo, pero tiene razón, todos asintieron y a partir de ese momento, se pusieron a trabajar sin la discutidera. Se logró un acuerdo para el apoyo a los ancianos e integrarse a trabajar con el pueblo vecino. Ahhh, eso sí les recordé que para vivir esa Palabra, hay que acercarse al Señor, sin Jesús en el corazón, no hay amor que dar y compartir.

Bendiciones.

P. Oscar
padreoscar@avemariatv.com